revista@idelcoop.org.ar
EXPERIENCIAS Y PRÁCTICAS
El Archivo Histórico del Cooperativismo Argentino. Una construcción autogestiva de redes y vínculos
Número 245 / Año 2025 / Por Plotinsky, Daniel
El artículo analiza el proceso de construcción del Archivo Histórico del Cooperativismo Argentino, cuya actividad comienza en 2018 con la formación de un equipo interdisciplinario en el marco del Programa Cooperativismo y Economía Social en la Universidad de la Secretaría de Polí- ticas Universitarias del Ministerio de Educación. Desde su creación, el Archivo se propone recuperar, identificar, clasificar, describir y preservar documentación de entidades cooperativas; desarrollar capacidades en profesionales y en integrantes del movimiento cooperativo para la recuperación de su memoria institucional; y difundir ese patrimonio en las cooperativas, las universidades y la sociedad en general. Finalizada en 2020 la etapa financiada por la Secretaría de Políticas Universitarias, el equipo fue constituyéndose en un colectivo autogestivo,2 por lo que el artículo reflexiona también sobre el proceso de conformación de ese colectivo, y aporta a identificar las oportunidades y los desafíos de las experiencias basadas en los valores de la economía social, solidaria, popular y feminista en el campo de la cultura y la educación. Finalmente, analiza además el papel que juega la memoria institucional en las entidades cooperativas, entendiendo que su recuperación es imprescindible en el desarrollo de la participación democrática de quienes las integran, y que hace posible inventariar el pasado colectiva e individualmente, reconocerse con historia, procesar el tiempo largo y valorar el presente, ayudando a encontrar valores, propuestas, proyectos inconclusos y sentidos de pertenencia.
The Historical Archive of Argentine Co-operativism. A self-managed construction of networks and links The article analyzes the construction process of the Historical Archive of Argentine Co-operativism, whose activity begins in 2018 with the formation of an interdisciplinary team in the context of Co-operativism and Social Economy at the University, a program of the Secretariat of University Policies of the Ministry of Education. Since its creation, the Archive aims to recover, identify, classify, describe and preserve documentation of co-operative entities; develop skills inprofessionals and members of the co-operative movement for the recovery of their institutional memory; and disseminate that heritage in co-operatives, universities and society in general. Once the stage financed by the Secretariat of University Policies ended in 2020, the team became a self-managed group, so the article also reflects on the process of conformation of this group, and contributes to identify the opportunities and challenges of experiences based on the values of the social, solidarity, popular and feminist economy in the field of culture and education. Finally, it also analyzes the role played by institutional memory in co-operative entities, understanding that recovering that memory is essential in the development of the democratic participation of its members, and that it makes it possible to inventory the past collectively and individually, to recognize oneself with history, to process the long time and to value the present, helping to find values, proposals, unfinished projects and a sense of belonging.
O Arquivo Histórico do Cooperativismo Argentino. Uma construção autogerida de redes e vínculos O artigo analisa o processo de construção do Arquivo Histórico do Cooperativismo Argentino, cuja atividade começou em 2018 com a formação de uma equipe interdisciplinar no âmbito do Programa de Cooperativismo e Economia Social da Universidade da Secretaria de Políticas Universitárias do Ministério da Educação. Desde sua criação, o Arquivo tem como objetivo recuperar, identificar, classificar, descrever e preservar a documentação das organizações cooperativas; desenvolver as habilidades dos profissionais e membros do movimento cooperativo para recuperar sua memória institucional; e divulgar esse patrimônio para as cooperativas, universidades e para a sociedade em geral. Uma vez que a etapa financiada pela Secretaria de Políticas Universitárias terminou em 2020, a equipe gradualmente se tornou um coletivo autogerido, e o artigo, portanto, também reflete sobre o processo de formação desse coletivo e ajuda a identificar as oportunidades e os desafios de experiências baseadas nos valores da economia social, solidária, popular e feminista no campo da cultura e da educação. Por fim, também analisa o papel desempenhado pela memória institucional nas organizações cooperativas, entendendo que sua recuperação é essencial para o desenvolvimento da participação democrática de seus membros, e que ela permite fazer um balanço do passado, coletiva e individualmente, reconhecer-se com a história, processar o longo prazo e valorizar o presente, ajudando a encontrar valores, propostas, projetos inacabados e um senso de pertencimento.

Revista Idelcoop nº 245 - Marzo 2025 - ISSN Electrónico 2451-5418 /  Sección Experencias y Prácticas

Idelcoop Fundación de Educación Cooperativa

 

 

El Archivo Histórico del Cooperativismo Argentino.

Una construcción autogestiva de redes y vínculos

 

Daniel Plotinsky[1]

 

La memoria de las instituciones cooperativas

Las cooperativas, por su doble carácter de empresas y movimientos sociales, tienen dos memorias. Una, la oficial, corresponde al conjunto de datos administrativos que las leyes y reglamentaciones obligan a registrar y guardar. La otra, más rica y significativa, corresponde a la vida de ese movimiento social, a los cómo, los por qué y los para qué de esas empresas.

Esas memorias, como la de la mayoría de las organizaciones sociales, solo ha sido parcial y asistemáticamente preservada. Las causas se encuentran en las vicisitudes económicas y políticas atravesadas por las instituciones, la urgencia de lo cotidiano, y la ausencia de una tradición que valorice el registro de la labor desarrollada.

Por otra parte, la actividad de los movimientos sociales, al margen de -cuando no enfrentados a- las instituciones estatales, ha motivado que los archivos y hemerotecas oficiales no los hayan tenido muy en cuenta. Todo esto en el marco de una sociedad que no valora, en general, la conservación de las huellas de su pasado.

En ese contexto, entendemos que la preservación de la memoria colectiva en y de las organizaciones sociales, en el marco de lo que Groppo (2002) denomina política de la memoria, adquiere especial significación en tanto apunta a modelar y construir un cierto tipo de identidad colectiva.                                                   

La recuperación de la memoria institucional hace posible reflexionar colectiva e individualmente sobre el pasado, reconocerse con historia, procesar el tiempo largo y valorar el presente. Según Garces y Milos (1985), opera además como una forma de encontrar valores, propuestas, proyectos inconclusos y sentidos de pertenencia, ayudando a contextualizar y desidealizar los recuerdos y las tradiciones.

Por otra parte, identidad, memoria y patrimonio aparecen hoy como elementos clave de la conciencia contemporánea. Identidad que remite a una singularidad que se elige y una permanencia que se reconoce; memoria que implica acuerdos, tradiciones y hábitos; y patrimonio como bienes que dan acceso a una conciencia histórica colectiva, constitutiva de una identidad grupal o institucional (Nora, 2008).

 

El estudio y la relectura de las experiencias producidas durante la vida de las instituciones resulta por eso un capítulo imprescindible en su proceso de crecimiento y en el desarrollo de la participación democrática de sus miembros.

Estas consideraciones ponen en primer plano la necesidad de realizar una búsqueda sistemática de todos los testimonios documentales, hemerográficos y orales que aún se puedan recuperar para la investigación y el patrimonio cultural de las entidades cooperativas; y de constituirlos en archivo para que esos documentos queden sujetos a los cuidados de quienes tienen competencia para defenderlos y prestarles ayuda y asistencia (Ricœur, 2000).

 

El Archivo Histórico del Cooperativismo Argentino

El proyecto de creación del Archivo Histórico del Cooperativismo Argentino (AHCA) tiene su origen en esa necesidad de reunir, dar a conocer y vincular los acervos documentales del movimiento cooperativo de nuestro país, ya que los pocos archivos de o sobre entidades cooperativas existentes se encuentran aislados y desvinculados, con poca difusión y con escasa accesibilidad para les investigadores, les cooperativistas, y la sociedad en general.

La propuesta se enmarca en un creciente proceso de acercamiento entre la historia y la archivística, acercamiento que se hace particularmente significativo en el caso de las fuentes orales (González, 1991).

Por otra parte, Wallot (1995) afirma que:

en la actualidad y en el futuro, el patrimonio documental que una sociedad o una época legará no será el resultado de una sedimentación inconsciente o de accidentes en su recorrido, sino que será, de alguna manera, ‘construido’ [porque] en el proceso de selección, la referencia principal no es el documento, sino la actividad humana. (p. 15)

En ese contexto, el proyecto de construcción del AHCA fue una propuesta del Archivo Histórico del Cooperativismo de Crédito,[3] asociación civil que además del acervo propio acumulado en casi treinta años de trabajo, tiene en guarda la documentación de la Confederación Cooperativa de la República Argentina Ltda. COOPERAR. Ambas instituciones, junto a la Universidad Nacional de Tres de Febrero UNTREF e Idelcoop Fundación de Educación Cooperativa, conformaron un equipo de trabajo integrado por investigadores/as y estudiantes de diferentes disciplinas, en el marco del Programa de Cooperativismo y Economía Social en la Universidad promovido por la Secretaría de Políticas Universitarias del Ministerio de Educación y Deportes de la Nación SPU (Laurito, 2016).

Los objetivos del AHCA, son:

  • Enriquecer el patrimonio histórico del cooperativismo argentino a través de la recuperación, creación y puesta en valor de todo tipo de documentación.
  • Organizar un centro de documentación compuesto por el Archivo Histórico de COOPERAR; un Archivo Oral integrado por filmaciones y grabaciones de entrevistas de historia oral realizadas a informantes clave por el equipo del Archivo, y por copias de entrevistas preexistentes; colecciones y fondos documentales de cooperativas y federaciones, recuperados en el marco del proyecto, identificados, clasificados, descriptos y preservados; una hemeroteca que albergue publicaciones periódicas editadas por cooperativas de primer y segundo grado; y una biblioteca auxiliar que aloje textos editados por las propias entidades cooperativas.
  • Confeccionar una página web desde la que se acceda a una guía de fondos documentales en AtoM, un software de código abierto para la descripción archivística y su difusión, según normas del Consejo Internacional de Archivos, que permita poner en consulta pública los fondos documentales propios, y los existentes en cooperativas y en archivos locales y sectoriales.

       

  • Desarrollar conocimiento y capacidades en profesionales universitaries y dirigentes y funcionaries cooperativos para la recuperación y preservación de la memoria histórica en general, y del cooperativismo en particular.
  • Producir materiales de difusión y de formación para los diferentes niveles del sistema educativo y para quienes integran las entidades cooperativas.         
  • Difundir el patrimonio histórico del cooperativismo en las cooperativas, en las instituciones educativas de todos los niveles, en las Universidades, y en la comunidad.

Se aspira, además, a que el proceso de construcción del Archivo pueda servir como modelo de trabajo para el desarrollo de instancias similares que recuperen la memoria institucional de otras experiencias de la economía social, solidaria, popular y feminista.

 

Algunas reflexiones sobre el Archivo Oral

El objetivo de un archivo oral es la creación sistemática y planificada, la preservación y la organización de fuentes orales, en el marco de lo que Aron-Schnapper y Hanet (1993) llaman “una verdadera campaña de archivos orales (…) no una simple recolección de testimonios” (p. 70).

Las fuentes orales asumen un rol significativo en el proyecto de creación del Archivo Histórico del Cooperativismo Argentino por razones que tienen que ver con la naturaleza de estas, las peculiaridades del movimiento cooperativo, y la cantidad y el tipo de documentación existente.

En cuanto a las características específicas, las fuentes orales:

  • Aportan información que no quedó documentada en otro tipo de fuentes. En ese sentido, son particularmente adecuadas “para la exploración de determinados campos fragmentarios para los que no hay o a los que no es accesible otro tipo de documento”. Además, exponen “una concepción más amplia del pasado inmediato y de su elaboración sociocultural como historia”, por lo que su práctica revierte sobre la comprensión de la historia en general (Niethammer, 1989, p. 5).
  • Suman otra visión sobre sucesos ya documentados, pues informan menos sobre los acontecimientos que sobre los significados. Según Portelli (1991), “nos dicen no solo lo que la gente hizo, sino lo que deseaban hacer, lo que creían estar haciendo y lo que ahora piensan que hicieron”. Esto permite clarificar “los entramados informales y los procesos reales de la toma de decisión (...) las motivaciones de las personas, y sondear los ‘hechos’ en su contemporaneidad, y además retrospectivamente” (p. 42).

En suma, la construcción de un archivo oral del cooperativismo es una acción necesaria en tanto nos permite entramar la historia y la memoria y construir fuentes que, a su vez, serán utilizadas por futures investigadores.

 

SPU: La conformación del Archivo (2019 / 2020)

La etapa fundacional del trabajo, financiada por el Programa de Cooperativismo y Economía Social en la Universidad, se desarrolló entre mediados de 2019 y principios de 2021, por lo que se vio afectada por la pandemia del COVID 19 y la normativa de aislamiento social preventivo y obligatorio ASPO. Ese contexto obligó a reconfigurar el plan de trabajo original, aunque lograron cumplirse la mayoría de los objetivos propuestos.

La primera tarea consistió en conformar un equipo de trabajo con características interdisciplinarias e interés en adquirir conocimientos específicos e inherentes al funcionamiento de un archivo histórico y a la historia del cooperativismo.

Para ello, fueron incorporades cinco investigadores y dos pasantes con formación en Ciencias Sociales, une profesional en archivística y otre especializade en conservación, cuya función fue esencial para la elaboración de pautas de trabajo para abordar las tareas de diagnóstico y descripción general de la documentación de las cooperativas a ser visitadas.

Se realizó una capacitación interna en nociones de archivística y de preservación y restauración de documentación en el Archivo del Instituto de Investigaciones en Arte y Cultura IIAC de la UNTREF.[4] Las jornadas de formación permitieron mejorar el abordaje y tratamiento primario de fondos de diferente volumen, estableciendo prioridades y objetivos de corto, mediano y largo plazo. Desde entonces, el vínculo se ha fortalecido funcionando como una institución de referencia y consulta permanente.

Otra capacitación fue en la realización de entrevistas de historia oral, con la finalidad de elaborar pautas de trabajo comunes. Simultáneamente, se concretó una reunión de trabajo con personal de Memoria Abierta[5] que transmitió su experiencia, ayudando a definir con mayor precisión qué tareas y en qué orden encararlas.  

Por otra parte, durante 2019 se comenzó a trabajar en la confección de diversos instrumentos de descripción del Fondo COOPERAR, tales como el inventario por unidades de conservación y el cuadro de clasificación; se confeccionó un protocolo y un manual de trabajo para la generación de signaturas normalizadas; y empezó a elaborarse un tesauro propio, basado en lenguajes controlados preexistentes, pero adecuado a las necesidades de un archivo sobre cooperativismo.

Simultáneamente, y mientras comenzaba el trabajo de construcción de una página web propia, se abrió una cuenta en las redes sociales Facebook e Instagram para dar a conocer la existencia del Archivo. Estas herramientas gratuitas permitieron encontrar una solución de comunicación eficaz, y también recibir las primeras consultas y solicitudes, así como el contacto con distintas cooperativas del país interesadas en ser parte del proyecto.

Con el objetivo de poner a prueba las pautas de trabajo diseñadas durante el tramo descripto, a mediados de 2019 se realizó un inventario del material de archivo preservado en la sede de la cooperativa El Hogar Obrero (EHO), y se visitó un depósito donde se guardaba documentación histórica de la cooperativa con potencial riesgo de deterioro acelerado.

Esta experiencia permitió perfeccionar las pautas de trabajo de campo y comenzar a encarar las primeras visitas a diferentes cooperativas del país, llegándose a visitar a 27 entidades antes de la declaración del ASPO.[a1] 

Hacia fines de 2019 comenzó a organizarse de un ciclo de actividades de formación para el nodo de cooperativas de la localidad de Sunchales (Santa Fe), tarea encarada junto al equipo del Archivo Histórico del grupo SanCor Seguros. La iniciativa de capacitar y transferir herramientas a personas de la comunidad, que les permitan iniciar proyectos de recuperación y preservación del patrimonio a nivel local, se vincula con dos metas de nuestro equipo: la necesidad de expandir las redes de archivos locales a lo largo del país y la convicción de que el proceso de creación de archivos redefine y reformula “los sentidos de pertenencia a un lugar determinado, de reconocimiento y conocimiento de las características compartidas y de un sentido de integración en una historia común” (Lobato, 2020, p. 221).

En esa dirección, el propio proceso de definir qué es “patrimonio”, estimula dinámicas sociales muy ricas, que involucran la historia con la memoria y crean condiciones de posibilidad para la multiplicación de proyectos de corte archivístico y/o museístico.

Para 2020 el plan era ambicioso. El equipo tenía en agenda numerosos viajes a distintas regiones del país, relacionados con visitas de prospección y asesoramiento a cooperativas, y tres jornadas de capacitación que reunirían a cooperativas ubicadas en puntos nodales, identificadas durante el tramo inicial del proyecto.

A pesar de la cancelación de los viajes, durante la cuarentena nacional continuó el trabajo, reformulando las actividades planificadas en una estrategia integral de capacitación a distancia, y de confección de materiales de divulgación sobre organización archivística y preservación de documentación en distintos soportes materiales. Para cumplir con este objetivo se organizó un taller de capacitación virtual, del que participaron 40 integrantes de 17 cooperativas, con perfil muy diverso.

Por otro lado, se completó el diseño de la página web,[a2]  la cual fue lanzada públicamente en julio con una presentación virtual que fue divulgada por varios medios cooperativos, y del que participó el presidente del Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social INAES, Mario Cafiero. La presentación tuvo gran repercusión: entre quienes participaron de la transmisión en vivo y quienes luego reprodujeron el video, más de 1800 personas fueron parte del lanzamiento.

Además, el equipo en su conjunto realizó una capacitación virtual organizada por el Archivo Histórico de la Universidad Nacional de La Plata y la Universidad Nacional de Quilmes sobre Archivística y su aplicación al sistema de gestión de archivos open source AtoM (Access to Memory)[6], el software elegido para el desarrollo del proyecto.

La profundización en la formación archivística permitió avanzar durante el segundo semestre de 2020 en la descripción de los fondos reunidos el año anterior. Desde entonces, se ingresó al sistema la descripción de instituciones archivísticas, autoridades productoras, y una reseña general de las cooperativas visitadas.

En cuanto a vinculaciones internacionales, destacan dos encuentros virtuales para intercambiar experiencias con The Co-operative Heritage Trust, institución británica que reúne y preserva las colecciones documentales pertenecientes al movimiento cooperativo del Reino Unido, localizada junto al Museo de los Pioneros de Rochdale, emplazado en el edificio original de esa cooperativa.[7]

Finalmente, durante este período comenzó a conformarse el archivo oral con la realización de 20 entrevistas a dirigentes y funcionaries de 14 cooperativas.

 

EL AHCA como colectivo autogestivo (2021/ 2024)

Finalizada la etapa desarrollada con financiación estatal en el marco del Programa de Cooperativismo y Economía Social de la SPU, quienes conformábamos el equipo de trabajo teníamos una sensación ambivalente y contradictoria. 

Los problemas afrontados habían ayudado a considerar mejor las dimensiones del trabajo y a redefinir objetivos de corto, mediano y largo plazo. También nos permitían conocer de primera mano y con mayor profundidad el rico acervo que se esconde en las entidades, y definir cuáles pueden ser las mejores estrategias para llegar a ellos.

La principal dificultad era conseguir los recursos económicos necesarios para llevar a cabo tamaña empresa. El proyecto inicial apenas había alcanzado para constituir y estabilizar la labor del equipo y aceitar metodologías de trabajo. Solamente poner en funcionamiento el proceso supuso muchas horas de esfuerzo interdisciplinario entre historiadores, archivistes, especialistas en conservación, y programadores especializades en archivos.

Como es de suponer, la etapa de puesta en pie del proyecto entraba en tensión con sus plazos breves y, en especial, con el riesgo de no obtener nuevo financiamiento que asegurase la continuidad del equipo de trabajo.

Desde el principio, el camino fue la cooperación. Para muchos de los problemas técnicos fuimos encontrado soluciones temporales gracias a los acuerdos establecidos con otros archivos, como Memoria Abierta y los que pertenecen a la UNTREF, particularmente el del Instituto de Investigación en Arte IIAC. Contábamos, además, con la experiencia que tiene acumulada el Archivo Histórico del Cooperativismo de Crédito.

Sin embargo, uno de los desafíos mayores y más interesantes a los fines de la apropiación del Archivo por parte de las entidades cooperativas, fue la generación de articulaciones con ellas. Esto significaba pensar en términos de alianzas para vincular los esfuerzos, las voluntades, y por qué no, los recursos que pudieran aportar.

Sea cual fuera la variante, lo cierto es que la continuación a largo plazo del proyecto depende, en buena medida, de que sea tomado por el propio movimiento cooperativo. Solo así se podrá garantizar que el AHCA se transforme en una gran red nacional de la que participen la mayor cantidad de entidades posible.

Se trata de federalizar el Archivo, poniendo en valor lo que ya existe, que es el patrimonio de las propias entidades, y aprovechar las tecnologías disponibles para hacerlo accesible. Es en forma mancomunada, solidaria, cooperativa, que podremos darle continuidad al proyecto y transitar los baches temporales en que escasee el financiamiento.

En ese contexto, quienes integramos el equipo de trabajo nos fuimos constituyendo paulatinamente en un colectivo autogestionado, que no necesariamente tomó conciencia de ello de manera inmediata, construyendo un funcionamiento basado en la autonomía y en nuestras propias capacidades.

La primera decisión colectiva fue evaluar que valía la pena mantenernos unides para, en principio, conservar en uso la página web y el catálogo, como una manera de no perder el trabajo realizado y para visibilizar la existencia del AHCA. En ese sentido, COOPERAR se comprometió a sostenerlas económicamente, y el colectivo a mantenerlas actualizadas trabajando ad honorem.

A su vez, el Archivo Histórico del Cooperativismo de Crédito ofreció su sede para funcionar como base de operaciones, permitiendo guardar las herramientas de trabajo y los insumos necesarios, además de la utilización de las computadoras y la atención del teléfono de contacto.

Simultáneamente, empezamos a analizar posibles fuentes de financiación. Y en ese proceso avanzamos como colectivo en un doble proceso:

Como afirman Fontanet et al. (2013), los proyectos autogestivos requieren de la obtención de recursos financieros necesarios para cada uno de los emprendimientos “de tal modo, las estrategias consisten en la búsqueda de subsidios, y en esa búsqueda los colectivos se van compenetrando en la gestión” (p. 71).

Por otra parte, para la toma de decisiones necesarias en esa búsqueda, el instrumento indispensable es la democracia participativa, y en esa experiencia “generada en los procesos de autogestión, el lugar que ocupa el individuo se transforma. El quién somos en relación a los otros y quiénes son los otros con respecto a nosotros cambia sustancialmente en las relaciones colectivas” (Fontanet, p. 56).

La conformación del colectivo autoorganizado y autónomo se fue dando mientras se avanzaba lentamente en el cumplimiento de alguno de los objetivos iniciales del AHCA a partir de diferentes fuentes de financiación.

En 2020, el Proyecto "Archivo Histórico El Hogar Obrero" fue seleccionado por el programa de Mecenazgo Cultural de la Ciudad de Buenos Aires y obtuvo financiación del Banco Credicoop C. L. Esto permitió continuar trabajando durante 2021 en la descripción general de la documentación de la cooperativa con la intención de constituir su archivo histórico, partiendo de la documentación localizada en la sede central de la institución. En su conjunto, el patrimonio documental de EHO incluye planos arquitectónicos, revistas, periódicos, fotografías, documentación escrita y audiovisual en los más variados soportes, así como obras de arte.

A fines de 2021, el AHCA fue seleccionado junto a otros diez proyectos de todo el país, en el concurso Desempolvando Archivos[8] por el proyecto “Una historia sobre cooperativismo argentino: el fondo de archivo de la Confederación Cooperativa de la República Argentina”. Esta financiación permitió desarrollar durante 2022 el trabajo archivístico y de preservación del patrimonio documental de COOPERAR, que reúne documentación del período 1961 - 2010. El fondo, cuyo catálogo fue puesto en acceso público al finalizar el trabajo,[9] constituye una herramienta indispensable para preservar la historia de la institución y del cooperativismo argentino en general.

En 2022 el proyecto “La Primera, Cooperativa de Consumo de Campana. Documentos locales para una historia social y económica de alcance regional”, presentado en conjunto con la Biblioteca Popular Jean Jaures de Campana (Buenos Aires) que tiene la documentación en guarda, fue seleccionado en el concurso Desempolvando Archivos. En este caso, el equipo del AHCA realizó la planificación general, la capacitación de un pequeño grupo de especialistas locales, y el asesoramiento y supervisión del trabajo. A fines de 2023 el fondo documental de la cooperativa, que desarrolló su actividad entre 1902 y 2004, fue puesto a consulta pública.[10] 

Simultáneamente, una parte del equipo participó en la actividad archivística y de preservación del patrimonio documental de la Sociedad Luz Universidad Popular, asociación cultural fundada en 1899 por integrantes del Partido Socialista. Más allá de sus vínculos históricos y actuales con EHO, esta fue la primera vez en que el colectivo brindó sus servicios a una entidad por fuera del movimiento cooperativo.[11]

Finalmente, a comienzos de 2024 el Proyecto "Archivo Histórico de El Hogar Obrero. Una cooperativa entre dos siglos" fue seleccionado por el programa Rescate de Archivos, otra de las líneas de trabajo de Iniciativa de Archivos. Esta financiación permite la continuidad de las tareas iniciadas en 2020/2021, en esta etapa con el rescate del voluminoso y rico acervo que se encontraba en un depósito de materiales de construcción, con alto riesgo en cuanto a su conservación, y su traslado a un edificio cedido por EHO que será la futura sede de su Archivo Histórico.

 

En forma simultánea con los proyectos para los cuales se consiguió financiación, el colectivo del AHCA sigue desarrollando otras actividades, entre las que se destacan el establecimiento de vínculos institucionales, tareas para fomentar la toma de conciencia de las entidades cooperativas sobre la importancia de preservar su patrimonio, y el sostenimiento de la página web y su catálogo.

Entre las primeras, vale mencionar la organización del panel “El rol de los archivos históricos en la evolución, la conservación y la promoción de la identidad cooperativa” en la Conferencia de Investigación sobre la Identidad Cooperativa de la Alianza Cooperativa Internacional ACI, desarrollada de manera híbrida en Seúl (República de Corea) en 2021. Los objetivos del panel fueron difundir e intercambiar las experiencias de diferentes entidades que preservan documentación histórica del movimiento cooperativo en todo el mundo; conocer los desafíos, logros y dificultades que supone el trabajo con la variada documentación generada por las cooperativas; y proponer la creación de redes internacionales de trabajo, colaboración y puesta en común de acervos archivísticos cooperativos.

Finalmente, cabe destacar que el Archivo ofrece de manera permanente una serie de servicios, algunos gratuitos y otros arancelados:

  • Asesoramiento técnico profesional orientado a conservar y preservar el patrimonio histórico de las cooperativas.
  • Conversión a formato digital de documentación histórica en soportes impresos, fotográficos, sonoros y audiovisuales.
  • Identificación, clasificación, descripción y organización de la documentación histórica para su acceso público.

 

Algunas reflexiones sobre el camino transitado

Hasta aquí desarrollamos las características fundamentales del proyecto en términos de los objetivos a los que aspiramos, pero también a los problemas, los dilemas y los interrogantes que encontramos en la experiencia concreta de puesta en práctica.

Cabe realizar algunas reflexiones en el camino de aportar a identificar las oportunidades y los desafíos de las experiencias basadas en los valores de la economía social, solidaria, popular y feminista en el campo de la cultura y la educación.

En primer lugar, recordar que el AHCA tuvo su punto de partida en el marco de un programa de financiamiento estatal cuyo objetivo era fortalecer el vínculo entre las Universidades y las entidades de la ESyS para impulsar el desarrollo, la innovación, la integración y la promoción de dichas entidades; apoyar la integración de políticas públicas dirigidas al fortalecimiento del sector; y promover la incorporación, expansión y fortalecimiento de la problemática de la Economía Social y Solidaria en las Universidades. En este sentido, consideramos que nuestra experiencia confirma el valor de este tipo de iniciativas.

En segundo lugar, algunas ponderaciones sobre qué importancia le dan las entidades cooperativas a la preservación de su memoria histórica. Un ejemplo emblemático es El Hogar Obrero. Este fondo documental es un verdadero archivo del cooperativismo argentino, que atesora documentación propia y de otras entidades. La principal tarea inicial fue no solamente asesorar a la cooperativa en materia de conservación y mejoramiento de las condiciones para la consulta de la documentación que habían preservado, sino impulsar a sus miembros para que comenzaran a conversar sobre la necesidad de avanzar, incorporando la numerosa documentación dispersa en diferentes edificios, en muy malas condiciones de guarda y sin registro alguno que la identificara.

En esos procesos se pone en juego no solo la capacidad del equipo, que por el momento es de modestas dimensiones. Lo que en verdad aparece (o no) es el compromiso de las entidades con su propia historia, y su interés por legar esa experiencia a las nuevas generaciones. Desde luego, hay entidades con mayor o menor capacidad para constituir equipos de trabajo propios, pero de lo que se trata verdaderamente, es de la decisión política de asumir la tarea.

En este sentido, notamos que la conformación del AHCA generó que entidades que tienen archivos institucionales, pero que no saben que son “históricos”, tomen consciencia de que lo son, de su valor colectivo, y de la necesidad de ponerlos a disposición de sus integrantes y de la sociedad toda.

En el fondo, el dilema es más profundo, porque no se trata exclusivamente de valorar con orgullo lo transitado, sino de comprender que la información es un derecho colectivo, y que no es posible conocer a fondo nuestra historia sin información de acceso público.[a3] 

En tercer lugar, algunas reflexiones sobre nuestra constitución en colectivo autogestivo, influenciades probablemente por el propio ámbito en el que actuamos, y en un proceso que no fue una decisión a priori, sino una progresiva toma de conciencia. Esta requirió de una introspección sobre nuestras prácticas, y del cruce con otras experiencias y reflexiones teóricas.

Así, nos sentimos identificades con la descripción de las cooperativas de artistas de Uruguay realizada por Etcheverry et al. (2019), respecto a su funcionamiento relativamente estable relacionado a la actividad principal de la cooperativa, poniendo el eje en el colectivo y en la tarea. Además, ninguna de ellas tiene una sede física ni horarios estipulados de atención; y si bien la gestión es colectiva, no necesariamente se respetan los aspectos formales de una cooperativa para la toma de decisiones.

Por otra parte, sentimos que la auto-organización contribuyó a que nuestras prácticas no queden despojadas de autoconciencia ni desarraigadas de la experiencia social. Más aun, percibimos que las mismas poseen lo que Mazzeo (2021) valora como una inmensa carga pedagógica.

Encontramos también que estamos logrando crear una “cultura organizacional cooperativa” con una mirada específica que valora la democracia interna, la participación colectiva, y la integración; y que un factor importante en nuestra consolidación y crecimiento es la construcción de una identidad propia, una cultura que nos integra (Bauni, 2021).

Finalmente, cabe preguntarse a quién le sirven los archivos históricos del cooperativismo, y cómo contribuimos al desarrollo cultural de las entidades de la ESSPyF y de la comunidad.

En principio, creemos que les sirven a todes, porque a través de la historia del cooperativismo podemos conocer la historia del país mismo y de quienes lo habitamos, de las necesidades y potencialidades regionales, y de los anhelos, luchas, frustraciones y logros colectivos.

En lo específico, a través de la historia de las cooperativas podemos reconocer, por ejemplo, cuándo y en qué regiones del país dicho movimiento creció como resultado del desinterés del capital privado o el abandono del Estado, cuándo y por qué fue objeto de políticas de promoción pública, y cuáles fueron las experiencias que surgieron desde concepciones ideológicas que pensaban al cooperativismo como un motor o camino de transformación socioeconómica.

Las preguntas, no obstante, son múltiples, y la tarea de determinar la evolución de este proceso y de poner en tensión periodizaciones institucionalizadas con la del propio objeto de estudio, es algo a lo que también podría contribuir el Archivo.

En suma, se trata de recuperar memorias y experiencias de lucha y de organización acumuladas a lo largo del tiempo; repensar momentos de crisis, y aprender de ellos. Pero también de construir información certera, fiable, que permita complejizar el propio conocimiento acerca de nosotres mismes como integrantes de la ESSPyF.

Se trata, también, de promover el conocimiento sobre el movimiento cooperativo en todos los ámbitos educativos, invitando a docentes, alumnes e investigadores a apropiarse del Archivo, a utilizarlo como soporte de sus investigaciones y para la elaboración de material didáctico.

 

Referencias:

Aron-Schnapper, D. y Hanet, D. (1993). De Heródoto a la grabadora: Fuentes y archivos orales. En Aceves Lozano, J. Historia Oral. Instituto Dr. José María Luis Mora. 55-79.

Bauni, N. (2021). Innovar y autogestionar: la organización del trabajo en las empresas recuperadas de Argentina. Teuken Bidikay - Revista Latinoamericana de Investigación en Organizaciones, Ambiente y Sociedad, 12 (19), 67–84. https://doi.org/10.33571/teuken.v12n19a3

Etcheverry, S; Romero, M. y Torrelli, M. (2019). Diez años de cooperativas de artistas en Uruguay. Naturaleza, funcionamiento y perspectiva. Revista Idelcoop (229), 119-145. https://www.idelcoop.org.ar/revista/229/diez-anos-cooperativas-artistas-uruguay-naturaleza-funcionamiento-y-perspectiva

Fontanet, F., García, A., Toscani, M. y Vidos, R. (2013). Autogestión y políticas públicas en Argentina: avances y desafíos de agenda en la post- convertibilidad. Revista Idelcoop (211), 59-74. https://www.idelcoop.org.ar/revista/211/autogestion-y-politicas-publicas-argentina-avances-y-desafios-agenda-post

Garces, M. y Milos, P. (1987). Aspectos educativos y políticos en la recuperación de la memoria popular. Eco.

Gonzalez Quintana, A. (1991). El archivero y las fuentes orales. Historia y Fuente Oral (5), 157-162.

Groppo, B. (2002). Las políticas de la memoria. Sociohistórica (11-12), 187-198. https://www.memoria.fahce.unlp.edu.ar/art_revistas/pr.3067/pr.3067.pdf

Lauritto, M. A. (2016). Programa de cooperativismo y economía social en la universidad, Desarrollando vínculos entre la Universidad y las entidades de la Economía Social y Solidaria. Revista Idelcoop (219), 167-173. https://www.idelcoop.org.ar/revista/219/programa-cooperativismo-y-economia-social-universidad-desarrollando-vinculos-entre

Lobato, M. Z. (Ed). (2020). Comunidades, historia local e historia de pueblos. Huellas de su formación. Prometeo.

Mazzeo, M. (2021). La cifra de la utopía concreta. En Azzellini, D. y Ness, I. (Coord.). Poder obrero: control y autogestión obrera desde la comuna hasta el presente. El Colectivo. 15–23.

Nora, P. (2008). Pierre Nora en Les lieux de mémoire. Trilce.

Niethammer, L. (1989). ¿Para qué sirve la historia oral? Historia y Fuente Oral, (2), 3-28.

Portelli, A. (1991). Lo que hace diferente a la historia oral. En Schwarzstein, D. (Comp.) La Historia Oral. Centro Editor de América Latina, 36-52.

Ricœur, P. (2000). La memoria, la historia, el olvido. Fondo de Cultura Económica.

Wallot, J. P. (1995). Archivística e historia oral en Canadá. Historia y Fuente Oral (14) 7–25.

 

 

 

 

 

[1] Magister y profesor en Historia. Director del Archivo Histórico del Cooperativismo de Crédito.

[2] El colectivo está conformado por Hernán Topasso, licenciado en Historia; Natalia Casola, doctora en Historia; Ulises Camino, doctor en Arqueología y licenciado en Ciencias Antropológicas; Natalia Rabasa, magister en Historia; María Millán, profesora universitaria de Historia y diplomada en Archivística.  Se puede consultar el Archivo en: https://www.archivohistorico.coop/es. Correo electrónico: contacto.ahca@gmail.com

[3] Más información sobre el Archivo Histórico del Cooperativismo de Crédito en www.archicoop.org.ar

[5] Más información sobre Memoria Abierta, en https://memoriaabierta.org.ar/wp/sobre-memoria-abierta/

[6] Más información sobre AtoM, en: https://www.accesstomemory.org/es/

[7] Más información sobre The Co-operative Heritage Trust, en: https://www.co-operativeheritage.coop/

[8] Una de las líneas de trabajo de Iniciativa de Archivos, alianza entre las fundaciones Bunge y Born y Williams que trabaja desde hace más de diez años en la preservación, el acceso, y el uso de archivos del patrimonio cultural y científico del país. Más información en: https://iniciativadearchivos.org/